Al final de la cola en plena autopista...
lograba avistar a los vendedores ambulantes de panelas,
que me alertaban la cercania de la gran ciudad,
lograba avistar a los vendedores ambulantes de panelas,
que me alertaban la cercania de la gran ciudad,
esperaba ansioso y con el pie adormecido de encroche y desencroche,
el calor hacia traslucido el carro, la radio no paraba de hablar de tan esperado encuentro...
Cada vez los stickers del Caracas se hacian mas numerosos,
poco a poco el frio humedo de la capital invitaba a bajar los vidrios,
(por su puesto al final imperó la inseguridad que invitaba a subirlos...)
ya ahi, trastaso tras trastaso, al fin en el hotel, el metro, la multitud desesperada...
la interminable y desesperante cola para entrar, vueltas tras vueltas,
es ahi? no!! es ahi!!!
Dos Horas de espera de pie, los labios resecos, la cerveza cara y distante...
recordando los jueves universitarios y extrañandolos,
la gente... el olor a mariguana, el humo... que se podia tocar con la mano...
Cuando salen? me preguntaba, le preguntaba y preguntaban,
el frio... la noche que se veia ansiosa y las luces que se encienden...
40.000 personas tuvimos la dicha de ver semejante evento en directo, que nos transporto a otro mundo, que dejo en nuestro recuerdo
la afirmacion de que sí, fueron, son y serán la banda que revolucionó, revoluciona y revolucionará el rock suramericano, y porque no, el mundial!
Se dejo oir el rock puro (y la adversion por el gobierno por supuesto... no podia faltar)
se desprendian las notas, los alaridos, gritos y desmayos que se esparcian en la noche... en la bruma de las personas que se difuminaban en la musica...
El corazón latía, la garganta se agitaba y todos (de forma desesperada) intentabamos hacer pública nuestra admiracion y excitación...
Terminó, pero queda en nuestros corazones esa esperanza,
asi como el cansancio, la sed y el deseo de mas...
omnipresente... de que es el comienzo de una nueva etapa en la historia de estos señores,
que nos hacen emitir las mas profundas emociones...
En la mente, la ciudad desaparecida... Caracas, por una noche la ciudad de la furia...
los recuerdos, la tensión, la arrogancia de Cerati...
Te esuche decir ... ya no estoy para eso... no ire...
Mi corazon, al igual que el de las demas 40.000 personas que ahi estubimos, asi como las de miles que no pudieron
me dicen lo contrario, siempre estare ahi para eso,
pues momentos como estos, son los que me alimentan el alma y me hacen sentir presto para la vida...
Soda...
Caracas...
Dios...
Gracias Totales...
el calor hacia traslucido el carro, la radio no paraba de hablar de tan esperado encuentro...
Cada vez los stickers del Caracas se hacian mas numerosos,
poco a poco el frio humedo de la capital invitaba a bajar los vidrios,
(por su puesto al final imperó la inseguridad que invitaba a subirlos...)
ya ahi, trastaso tras trastaso, al fin en el hotel, el metro, la multitud desesperada...
la interminable y desesperante cola para entrar, vueltas tras vueltas,
es ahi? no!! es ahi!!!
Dos Horas de espera de pie, los labios resecos, la cerveza cara y distante...
recordando los jueves universitarios y extrañandolos,
la gente... el olor a mariguana, el humo... que se podia tocar con la mano...
Cuando salen? me preguntaba, le preguntaba y preguntaban,
el frio... la noche que se veia ansiosa y las luces que se encienden...
40.000 personas tuvimos la dicha de ver semejante evento en directo, que nos transporto a otro mundo, que dejo en nuestro recuerdo
la afirmacion de que sí, fueron, son y serán la banda que revolucionó, revoluciona y revolucionará el rock suramericano, y porque no, el mundial!
Se dejo oir el rock puro (y la adversion por el gobierno por supuesto... no podia faltar)
se desprendian las notas, los alaridos, gritos y desmayos que se esparcian en la noche... en la bruma de las personas que se difuminaban en la musica...
El corazón latía, la garganta se agitaba y todos (de forma desesperada) intentabamos hacer pública nuestra admiracion y excitación...
Terminó, pero queda en nuestros corazones esa esperanza,
asi como el cansancio, la sed y el deseo de mas...
omnipresente... de que es el comienzo de una nueva etapa en la historia de estos señores,
que nos hacen emitir las mas profundas emociones...
En la mente, la ciudad desaparecida... Caracas, por una noche la ciudad de la furia...
los recuerdos, la tensión, la arrogancia de Cerati...
Te esuche decir ... ya no estoy para eso... no ire...
Mi corazon, al igual que el de las demas 40.000 personas que ahi estubimos, asi como las de miles que no pudieron
me dicen lo contrario, siempre estare ahi para eso,
pues momentos como estos, son los que me alimentan el alma y me hacen sentir presto para la vida...
Soda...
Caracas...
Dios...
Gracias Totales...
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